udla

Buenas prácticas de turismo comunitario

Convertir al Ecuador en un destino
turístico no solo por sus
bellezas naturales, sino por la
hospitalidad y capacidad de nuestras
comunidades para brindar servicios
de calidad y conservar la riqueza. Es el
objetivo que persigue la Universidad de
Las Américas.
Por esta razón la Carrera de Ingeniería
en Administración de Empresas
Hoteleras y Turísticas, y el Programa
de Pequeñas Donaciones del Fondo para
el Medio Ambiente Mundial (FMAM),
presentaron el Manual de Buenas
Prácticas de Turismo en Áreas Naturales
con Gestión Comunitaria.
La publicación expone varias iniciativas
comunitarias en las provincias de
Esmeraldas, Sucumbíos y Chimborazo,
con la finalidad de promover la conservación
de la biodiversidad a través de la
creación de medios de vida sostenible.
El doctor Carlos Larreátegui, rector
de la UDLA, manifestó que este
importante esfuerzo desarrollado con
Naciones Unidas y el Ministerio del
Ambiente entrega una serie de consejos,
prácticas y guías bajo preceptos fundamentales
como el respeto a la naturaleza
y a la biodiversidad.
El documento invita a las comunidades
a aplicar acciones concretas para
brindar una operación turística que sea
competitiva; identifica criterios ambientales,
socioculturales, administrativos
y de servicio que potencien la oferta y
ayuden a preservar la vida de las comunidades.
Además, el trabajo incluye reglamentos,
instrumentos, guías de conducta, y
recoge las voces y las propuestas de la
gente sobre las cuales se ha construido
este trabajo.
El manual será una herramienta
utilizada en la Carrera de Ingeniería en
Administración de Empresas Hoteleras
y Turísticas de la Universidad. Para
Germán Collahuazo, representante
de los Organismos de Proyectos de
Turismo Comunitario, la inclusión de
este material en el syllabus de la Escuela
es importante, pues “la academia es la
encargada de formar a los futuros profesionales
que serán los que tengan que ir
a las comunidades para apoyar nuestros
procesos”, dijo.
Para Diego Zorrilla, coordinador residente
de la Organización de Naciones
Unidas en Ecuador, el turismo es una
herramienta para utilizar la biodiversidad
y diversidad cultural de nuestro
país, pero al mismo tiempo para protegerla.
Explicó que la finalidad de la
gestión comunitaria es “brindar la posibilidad
de asegurar el desarrollo de las
comunidades (…) y finalmente contribuir
al buen vivir que es el maravilloso
paradigma que tienen en Ecuador”.
Aseguró que el manual invita a visitar
todos los lugares mágicos donde las
comunidades indígenas, campesinas y
afrodescendientes acogen a los turistas
y les permiten conocer su entorno, su
forma de relacionarse con la naturaleza
y su compromiso por defender la
Pachamama y sus derechos.El doctor Gonzalo Mendieta, vicerrector
académico de la UDLA y decano de
la Facultad de Turismo y Hospitalidad,
reflexionó sobre el gran capital turístico
que tiene Ecuador, sus recursos y su
explotación; sin embargo, considera que
nos olvidamos de que hay riquezas que
no deben ser explotadas sino cultivadas
para que rindan frutos. “La academia no
está aislada de la comunidad y su misión
es generar conocimiento que genere un
vínculo entre las dos. Este es un esfuerzo
colectivo entre varias entidades y ese
es el tipo de academia que queremos”,
afirmó.
Antes de finalizar la presentación,
Mónica Hidalgo, directora
de Planificación del Ministerio del
Ambiente, dijo que este manual demuestra
la voluntad y el consenso alcanzado
por las comunidades, la academia, el
gobierno y la cooperación internacional
para establecer la metodología y las múltiples
recomendaciones que permitirán
un buen manejo del turismo comunitario.
“El Ministerio reafirma la confianza
y el apoyo depositado en todas estas
iniciativas generadas por las comunidades,
los programas de cooperación
internacional y las universidades para
promover la formación y el desarrollo
de la investigación y la innovación”,
concluyó .