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La labor de la enfermera es holística

El 12 de mayo se celebra el Día de la Enfermera en honor a la fecha de nacimiento de Florence Nightingale, considerada como la madre de esta profesión. Para rendir homenaje a esta carrera hablamos con Kirsten Falcon, Docente de la UDLA y enfermera con más de 25 años de experiencia. Ella además es especialista en lactancia materna y se dedica a la investigación en la Universidad.

¿Qué te inspiró a seguir esta profesión?

No te puedo decir desde que edad exactamente quise ser enfermera, pero lo que recuerdo es que cuando estaba en la escuela y nos daban la opción de ser parte de los clubes y yo siempre seleccionaba el de Cruz Roja. A quien se lastimaba yo curaba. Luego, cuando tenía 15 años, una persona borracha chocó el carro en el que íbamos mi hermana, dos amigas y yo. Mi primera reacción fue ayudarles a salir y con un pañuelo inmovilicé el brazo de alguien. En medio del fervor de ayudar ni me había dado cuenta que estaba lastimada porque tenía un vidrio incrustado en mi frente y me salía mucha sangre. Claro, mi hermana me vio y se desmayó del susto.

¿Cuál ha sido tu trayectoria profesional?

He trabajado por más de 25 años en enfermería. He estado en todas las áreas: consulta externa, quirófano, en el área rural… También he trabajado como administradora de piso de hospitales privados de Quito y en terapia intensiva del Hospital del Seguro.

Ahora eres Docente de tiempo completo y, ¿te dedicas también a la investigación?

Junto con cuatro investigadores más de la UDLA y de otras instituciones estamos investigando sobre violencia obstétrica. Esta es una ley que se está trabajando en la Asamblea y por la relevancia del tema nos interesa formar a los estudiantes en la prevención de este tipo violencia que afecta a las mujeres durante su etapa perinatal y del embarazo. La investigación ya ha sido aprobada por la Universidad y también por el Ministerio de Salud donde se realizará el estudio.

Y en cuanto a lo académico, ¿dónde te formaste?

Estudié una maestría en materno- infantil con mención en educación superior en la Universidad de Puerto Rico y soy Licenciada en Enfermería por la Universidad Católica.

¿Cuáles crees son las características que debe tener una persona que estudie Enfermería?

Tiene que ver con la vocación, es decir con la actitud de servicio, con que seas una persona de buen corazón que quieras ayudar a los demás. Sin embargo no es solo eso. La enfermería profesional, como la que ofrecemos en la UDLA, tiene que ver con el conocimiento científico por eso estudian asignaturas como: biología molecular, bioquímica, anatomía, fisiología, patología…

¿Por eso es que se dice que hoy la enfermera forma parte de un equipo multidisciplinario?

Precisamente. Ya no se ve a la enfermera como antes. Ahora la profesión es cuestión de conocimiento y de involucrarse con otros profesionales. Desde hace rato dejó de ser una profesional que sin criterio científico hace un mandado o cumple una orden. De hecho, puede objetar o dejar de cumplir una orden médica en caso de que ponga en riesgo al paciente. Pero, para objetar, complementar el conocimiento, ayudar con el diagnóstico de enfermería, con un tratamiento, con un objetivo, con una intervención de enfermería se debe conocer la patología de ese paciente, además de saber analizarlo en su contexto porque el tratamiento que se otorga no es solo físico sino también psicosocial y espiritual.

Entonces, en este sentido, ¿podemos decir que va más allá del médico?

No podría decir eso. Más bien complementa el tratamiento físico del médico porque la enfermera brinda un trato holístico tomando en cuenta todos los aspectos. Puede ser que una persona tenga algo mal en su cuerpo y esté en proceso de curación, pero quizás el médico desconoce el contexto social en el que se encuentra o la soledad en la que está. Analizar aquello es muy importante para que supere la enfermedad, y las enfermeras estamos preparadas para ello, para realizar un procedimiento que tiene que ver mucho con la empatía, con ponernos en el lugar del paciente.

Tú formaste parte de las brigadas de la UDLA que viajaron para colaborar con los damnificados por el terremoto de la Costa ecuatoriana. ¿Cómo fue esa experiencia?

Yo siempre quiero ayudar y tengo en mis manos la herramienta que es este conocimiento que me da la profesión. Por eso, apenas sucedió el hecho yo hablé con mi directora para que me tome en cuenta en caso de que haya alguna brigada. Al llegar encontramos mucha destrucción, algunos problemas sociales, pero también el espíritu de la gente de Manabí que se cae pero sabe levantarse.

¿Cuáles fueron tus labores específicamente?

Junto con médicos y psicólogos armamos un campamento para personas que necesitaban atención. Fueron 495 pacientes en dos días. Además desarrollamos un instrumento para recoger la información de quienes atendimos, su edad, la situación de sus casas, si estaban en un albergue, etc. Entonces nos sirvió para tener una estadística, un estimado de lo que hicimos. (DB)

*Si quieres conocer más sobre esta carrera clic aquí: Escuela de Enfermería