“La enfermería no es solo una carrera, es un estilo de vida. Es levantarse cada mañana y tener en mente: ´hoy voy a ayudar a alguien´. También es tener esa responsabilidad de generar un cambio en el mundo y de tener las herramientas para hacerlo”, esto piensa sobre su carrera, Antonella Cornejo, Presidenta de la AseUDLA de Enfermería.
Por eso esta profesión requiere de una gran responsabilidad, compromiso y vocación. Y todo ello se sella con la imposición de la cofia y la toma del juramento en la ceremonia de la luz en la que participaron los estudiantes de 6°,7° y 8° semestre de Enfermería de la UDLA.
La luz representa el conocimiento impartido a lo largo de la formación académica, el uniforme blanco es la pureza, el compromiso y el cuidado de los pacientes; y la cofia simboliza es la identidad, el honor y la dignidad de la escuela en la que se forman estos profesionales, destacó Margarita Arroyo, Directora de la carrera.
Lo hizo durante la ceremonia el 8 de mayo de 2018 en el contexto del Día de la Enfermera, que se celebra cada 12 de Mayo, en honor al nacimiento de Florence Nightngale, pionera de la enfermería moderna.
Precisamente Alfredo Borrero, Decano de la Facultad de Ciencias de la Salud, recordó a esa profesional durante su discurso destacando la importancia de los profesionales en el contexto de la atención a los pacientes. “La mortalidad en los hospitales estaba en 75% y con la gestión de Florence bajó a 24%”, contó y explicó que sucedió a mediados de 1800 en el contexto de la guerra, en la península de Crimea.
“Esta fecha (12 de Mayo) marca la vida y el compromiso que tenemos hacia nuestra sociedad, nos hemos reunido para conmemorar el Día de la Enfermera y que mejor manera de hacerlo que entregando al mundo gente que ama lo que hace”, mencionó Patricia Carrero, Docente de Enfermería.
Ella realizó el juramento de la luz a los próximos profesionales de la salud donde ellos se comprometen con responsabilidad al cuidado de los pacientes. “La luz debe ser entendida desde la Academia, como la formación científica, técnica y humana impartida por todos los docentes y que guían el camino en el campo profesional”, puntualizó.
Las enfermeras reciben su cofia, que por su color y forma se distingue de la de otras escuelas de formación académica, mientras que los enfermeros reciben un distintivo como un pin en forma de lámpara. Jorge Sánchez fue uno de los participantes y cuenta que para él este distintivo representa que tiene el compromiso de cuidado, de dedicación de su labor y su vida para luchar a favor de la salud del paciente.
Además, para Antonella, los profesionales de enfermería deben ser líderes para aportar a los equipos médicos con su luz y conocimiento, por eso deben estar en preparación constante. “Trabajar con una persona no solo significa realizar un procedimiento, es relacionarse con su familia, con su contexto…”, dijo.
Además de esta ceremonia, la semana del 7 de mayo se realizaron varias actividades como ponencias, paneles exposiciones, eventos deportivos y una casa abierta que muestra cómo la carrera de vincula con la comunidad. (DB)
