Habitualmente, el blockchain es asociado al surgimiento de las criptomonedas; y si bien su estructura se aplica a dicho fenómeno, el potencial de esta herramienta también conllevaría un profundo impacto social: dispositivos de seguridad, tokens para el crecimiento productivo, tracking o registro de buenas prácticas sociales y ambientales, justicia alternativa, entre otros. En ese aspecto, -y aunque todavía no se dimensiona su verdadero potencial- esta tecnología constituye una herramienta que podría transformar los modelos operativos y de negocio de las empresas.
Esta premisa fue la que Édgar Herrador, experto y arquitecto en soluciones de blockchain, expuso durante su charla sobre el impacto que tiene dicha estructura en el ámbito tecnológico y corporativo. Ineficiencia, obscuridad en los procesos, falta de confiabilidad, poca coordinación: varios son los problemas que incentivan una intervención a través de bloques o nodos con el objetivo de mejorar la distribución de datos; situación que, a su vez, comprende una nueva estrategia de negocio.
Por ejemplo, cuando joyería desea certificar que sus diamantes no se derivan de un contexto de explotación y violencia, puede incurrir en un sistema de blockchain. De esta forma, cada parte del proceso (exploración, extracción, producción) puede incluir un código que, a su vez, forma parte de una cadena que codifica, almacena y conecta, información cuando así sea requerido. De ahí que cuando un cliente pregunte a cerca de la procedencia del diamante, la tienda pueda evidenciar, con claridad, el funcionamiento de su cadena de valor.
Esta lógica también se replicaría en restaurantes que quisieran demostrar el lugar donde proceden sus alimentos. Y su alcance es exponencial. Además del tracking que tendría un amplio valor social, diversas son las aplicaciones prácticas que tendría el blockchain: desde la resolución de conflictos legales a través de sistemas de mediación y justicia alternativa, hasta la configuración planes de recompensa (millas) a través de tokens. Cabe mencionar que la implementación de este sistema también supondría un cambio corporativo en términos de arquitectura y diseño empresarial.
Según Herrador, en algunos países de Europa, el esquema de blockchain ya está siendo empleado para pagar ciertos productos y servicios. Y son cada vez más los establecimientos que se unen a esta estructura, entre ellos, Starbucks. No obstante, el futuro de este sistema está en el impacto social y su importancia para la cadena de suministros de las empresas. En Ecuador, particularmente, la industria de banca y seguros es quien más interesada se muestra respecto al tema.
Al respecto Germán Pancho, director de la Maestría en Gerencia de Sistemas y Tecnología Empresarial de la UDLA, señaló que la transformación digital ya está repercutiendo en el país: de hecho, son 35 las startups que están implementando procesos de blockchain. “La aplicabilidad de este sistema es inmensa: simplificación en transacciones comerciales, notarización de contratos, reducción de trámites municipales. Las redes de confianza que promueve el blockchain impulsa nuevas soluciones de negocio”.
En esa línea, la charla de blockchain, desde el ámbito académico y conceptual, permitió a la comunidad universitaria sintonizada con el entorno. Y en la medida que comprende un encuentro que analiza temas de vanguardia sobre los que no existe literatura en el país, incurre en la reflexión sobre el alcance de las nuevas tecnologías.
En contexto:
Esta ponencia pertenece al Ciclo de Conferencias de Líderes de TI 2018. La charla se realizó en el auditorio del Campus Granados de la Universidad de Las Américas y contó con la participación de más de 130 ejecutivos de alto nivel. El próximo encuentro está previsto para agosto. (NC)
