Equipos más compactos, perspectivas diferentes pero eficientes, productos mejorados y más, son algunas de las características que tienen los grupos de trabajo conformados por porcentajes iguales de hombres y mujeres.

Sin embargo, en el Ecuador solo el 3 % de mujeres pertenecen a los equipos de desarrollo tecnológico en empresas de producción de tecnología. Esto según Paola Pullas, ingeniera en Sistemas y especialista en bases de datos, quien fue una de las conferencistas invitadas por la Facultad de Ingeniería y Ciencias Aplicadas (FICA) para conmemorar el Día Internacional de las Niñas en las TIC, que se celebra el cuarto jueves de abril desde 2010.

Para Pullas, que las niñas y mujeres accedan a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) permite un mejor desarrollo de la tecnología, ya que aportan una visión diferente en el mundo digital y porque las empodera de lo que hacen.

Además, que las niñas accedan a la tecnología y a las TIC acorta la brecha digital y de género porque permite que las mujeres desarrollen de mejor manera su creatividad, que conozcan otras realidades y que busquen alcanzar sus ideales por sus esfuerzos y no depender de nadie. Expande sus horizontes y les permite ingresar a ese mundo de las ingenierías que siempre fue concebido solo para los varones.

Un ejemplo de esto es el de Andrea Cobos, ingeniera en Sistemas y que actualmente es jefe de Desarrollo Tecnológico en Telefónica. Ella estudió en Cuenca y tuvo que vivir la discriminación de sus docentes y de sus compañeros, quienes muchas veces la querían relegar a las tareas administrativas y no dejarla poner en práctica sus conocimientos en programación o en ejercicios matemáticos y de física.

Andrea tuvo que esforzarse y demostrales tanto a sus docentes como a sus amigos que era capaz de hacerlo de igual o de mejor manera todas las tareas que tuvo a lo largo de sus estudios. Ella considera que el comportamiento de los hombres en estas carreras es común, ya que el sistema educativo las ha estereotipado.

La otra cara es ABB-Ecuador, una empresa Suiza-Sueca que se dedica al desarrollo tecnológico para industrias digitales. En este lugar trabaja Adriana Gutiérrez, ingeniera en Electrónica y Automatización, quien resalta el trabajo de ABB para brindar igualdad de oportunidades para mujeres y hombres internamente.

Si bien Adriana tuvo que vivir discriminación por ser mujer durante su vida universitaria, hoy considera que tanto hombres como mujeres son importantes para mejorar los procesos de innovación en la revolución 4.0 y que esto beneficie a la sociedad.

Sin duda, que las niñas y mujeres accedan a las TIC permitirá reducir brechas de género, digitales y dotará de las mismas oportunidades a quienes decidan incursionar en el mundo de la tecnología.

El evento se desarrolló el pasado 25 de abril y se abordaron otros temas como: inteligencia artificial, ciberseguridad y redes móviles.