“Muchas personas se enfocan solo en hacer proyectos para sacar un título o para ganar dinero, pero es importante desarrollar propuestas que sirvan para algo”, menciona Miguel Arellano, estudiante de 7° semestre de Multimedia y Producción Audiovisual.

Lo dice porque colaboró en el desarrollo de una idea de Ikiam Zurita, estudiante de Música, que ideó un videojuego que promueve la música y en general la cultura afroecuatoriana.

The Voice of The Elders es el nombre de este videojuego en 3D en el que Ikiam dejó ver sus tres pasiones: la música, la marimba en específico y los videojuegos, lo que plasmó finalmente en su proyecto de titulación. “Mi idea era fusionar mis aficiones pero con un objetivo más amplio que fue mostrarle a la gente sobre su propia cultura”. 

El videojuego

Para llevar a cabo su propuesta buscó un socio en Multimedia y Producción Audiovisual. Así, por un amigo, conoció a Miguel y desde ahí comenzaron a trabajar en conjunto.

The Voice of the Elders está ambientado en la provincia de Esmeraldas. Las personas pueden realizar varias actividades como recoger frutas, quemar cosas y lo más destacado, tocar instrumentos tradicionales como la marimba.

Se espera en el futuro habilitar un museo, que explique en detalle la cultura afroesmeraldeña y desarrollar la opción para que la gente pueda navegar por un río.

Para probar este desarrollo, Ikiam y Miguel hicieron un experimento con estudiantes y docentes, principalmente de Música y también de otras carreras. El juego llamó tanto la atención que esperaban un número menor y llegaron casi 100 personas “No nos esperábamos tanta acogida”, dice Ikiam y comenta que la gente no paraba de jugar.

Manuel, con sus conocimientos adquiridos en la carrera de Multimedia y Producción Audiovisual, fue quien desarrolló el videojuego bajo la dirección de Ikiam, quien fue el que generó toda la investigación correspondiente además de la música que es una fusión entre lo tradicional y moderna es decir de videojuego.

Miguel cuenta que ayudó a Ikiam con su proyecto de titulación por el simple gusto de hacerlo. “Lo interesante es fortalecer esta comunión entre carreras. Teniendo tanto potencial en la UDLA se pueden sacar proyectos muy chéveres”, explica.

Por eso, si bien están interesados en comercializarlo en un futuro y desarrollarlo con mayores recursos, también, hoy, están orgullosos del producto que crearon porque coinciden en que su intención es promocionar la cultura ecuatoriana.

“En la carrera de Música tenemos el taller de marimba, en el cual nos enseñan a tocar los instrumentos tradicionales y también sobre el uso de cada ritmo, sobre las festividades… pero para una persona que no estudie Música es muy difícil mostrarle este medio sin encontrar un elemento de su pleno interés”, cuenta Ikiam. (DB)