Estigmatizar, etiquetar, menospreciar, denigrar o discriminar son acciones que sufren los consumidores de algún tipo de droga. ¿Pero sabías que el alcohol es una droga y es el principal detonante de accidentes, muertes violentas y otros comportamientos considerados anormales?

Seguramente bebiste alcohol alguna vez y no recuerdas lo que hiciste, también al siguiente día tienes el denominado ‘chuchaqui moral’ y esto te parece normal. ¿Pero sabes por qué es eso? Porque las bebidas alcohólicas son drogas permitidas y son aceptadas por la mayoría de la sociedad, pero cumple la misma función que otras drogas como la marihuana, la cocaína, la heroína, LSD, entre otras, que lo que hacen es alterar tu sistema nervioso.

¿El malestar? También lo tienen otros consumidores de drogas ilegales y esto se debe a que no todos los organismos asimilan de la misma forma las diferentes sustancias.

La intención no es justificar a los consumidores, pero tampoco seguir estigmatizando a quien lo hace, ya que cada uno consume distintos tipos de drogas legales o ilegales por diferentes motivos: por recreación, presión social, depresión, tratamientos médicos y adicción.

Y de igual manera no en todos tiene la misma reacción, hay quienes se ponen más creativos, quienes se tranquilizan, se ponen más alegres y otros que reaccionan desde el otro lado. ¿Las consecuencias? Muchas, ¿buenas o malas? Eso se lo dejamos a quien quiera juzgarlo.

¿Prevenir el consumo? Es una opción, pero no la única, debido a que las drogas al parecer tienen otra dimensión en el mundo.

El consumo de drogas no solo son los consumidores, sino que este es el más visible y el que más represalias tienen, sino a un entorno que tiene intereses políticos, económicos y sociales. ¿Quién maneja esto? El sistema, el poder establecido, que a pesar de condenarlo, por otras vías, lo financia y le concede licencias para seguir llevando drogas a todos los rincones del mundo.

¿Los cárteles y los distribuidores? Solo son eslabones de una gran cadena que a pesar de siempre verse acorralada nunca desaparece.

Estos fueron algunos de los tópicos que se abordaron en el conversatorio ‘La función de la droga en el mundo contemporáneo’ organizado por la Escuela de Psicología de la UDLA y que contó con la presencia de docentes y especialistas en este tema como: Javier Toro, docente de la UDLA; Betul Rojeab, docente de la Pontificia Universidad Católica; Esteban Ricaurte, docente de la Universidad internacional SEK; Lorena Villacís, funcionaria del Ministerio de Salud Pública; y Jaime Moscoso, docente de la UDLA. (OP)