Por Diego Egas – Director de la Maestría en Finanzas con mención en Mercado de Valores y Banca.

Las notas estructuradas son productos financieros que ofrecen una alternativa de inversión.  Su principal característica es que cada nota contiene más de un instrumento financiero; la combinación de varios instrumentos financieros dentro de una nota la cataloga como un producto híbrido, que busca rendimientos más elevados con un componente de diversificación que reduzca el riesgo.   Un ejemplo de nota estructura podría ser una que combine un instrumento de renta fija con uno de renta variable.  El instrumento de renta fija es representativo de deuda donde de antemano están predefinidos los pagos, tanto en monto como en periodicidad.  Por otro lado, los instrumentos de renta variable tienen un rendimiento incierto y guardan relación con los resultados del desempeño de la acción de una compañía o de un índice bursátil predeterminado.   Las notas estructuradas se clasifican en notas de crecimiento y de rentabilidad; las de crecimiento entregan al final del período la cantidad de recursos que se generen al liquidar los activos que contienen la nota, mientras que las notas de rentabilidad tienen pagos periódicos de flujos, como si fuesen cupones de un bono.   En definitiva, las notas estructuradas son una buena alternativa de inversión para obtener rendimientos más altos en comparación con una inversión en un solo instrumento de renta fija.   Si quieres aprender más sobre instrumentos financieros, te invitamos a conocer nuestra: Maestría en Finanzas con Mención en Mercado de Valores y Banca.