Por Sandra Muñoz – Directora académica de la Escuela de Negocios UDLA

Es innegable que, en la actualidad, las empresas se mueven dentro de entornos volátiles y complejos que exigen la toma de decisiones rápidas.

Estos cambios constantes y la incertidumbre son conocidos como ambientes VUCA, por las siglas en inglés de volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad; y afectan directamente a la planificación estratégica de las organizaciones, por lo que es necesario gestionarlos lo antes posible.
Una de las herramientas útiles para enfrentar los ambientes VUCA es el “Método Perdue” para el desarrollo creativo. Este método consiste en diseñar estrategias basadas en cuatro pilares:
Fluir, que implica dejar volar la imaginación, siempre cuestionando todo lo que vemos.
Ser original, forzándonos a buscar nuevas alternativas más allá de las evidentes.
Ser flexible, que las ideas que generamos se adapten o cambien en diferentes perspectivas para hacerlas más atractivas y viables.
Aterrizar o elaborar la idea, dejando de lado la ambigüedad.

Es fundamental forzar a nuestro cerebro a pensar en cosas distintas, desarrollar el pensamiento lateral. Tal como lo señaló Tim Brown, consultor en innovación y creador del Design Thinking: “ante los problemas de siempre, soluciones diferentes”.