Tendencia: los millennials. Estos jóvenes nacidos entre 1980 y 2000 son la generación actual y por tanto a quienes debemos enfocar todos nuestros esfuerzos de comprensión. Se trata de entenderla para generar productos y servicios que se adapten a sus necesidades.

Si partimos de 1980 entenderemos que son los jóvenes que en 2016 tienen unos 36 años y de ahí hasta 2000 tendrán ahora unos 16 años. Por tanto la mayoría de ellos estarán ya trabajando desde hace algunos años y habrán acumulado algo de dinero para hacer compras grandes, ¿o no?

Estudios de Goldman Sachs y JP Morgan, citados en la Revista Forbes y de Principal Financial Group, recogido en El Financiero, nos otorgan algunas claves para entender este tema de las finanzas en esta generación.

• Resulta que los jóvenes millennials deciden destinar su dinero en lo inmediato. Viajes entretenimiento, tecnología son los principales gastos.
• Con la vivienda sucede algo distinto a lo que pasaba con la generación de los baby boomers. Los millennials prefieren alquilar a comprar ya que eso implicaría un compromiso de largo plazo y les restaría la posibilidad de hacer otras compras que les generan más satisfacción.
• Otra de las tendencias, y a propósito de las crisis de los últimos años, es vivir con los padres incluso cuando ya alcanzaron una independencia financiera.
• Con los autos sucede lo mismo. La preferencia apunta a no tenerlo. Caminar, andar en bici son opciones para ahorrar en gasolina. También lo son compartir un auto entre varios, usar taxis o usar este vehículo en ocasiones estrictamente necesarias.
• Gastan en entretenimiento. Sí. Pero lo hacen de una manera distinta, lejos de la opulencia y el lujo gustan de cosas más prácticas. Por eso Netflix, con acceso a miles de títulos, tiene más aceptación que el “antiguo” sistema de comprar un DVD original que seguro acabará almacenado en alguna caja. Lo mismo sucede con la música, donde plataformas como Spotify son favoritas.
• A diferencia de las amas de casa de las generaciones anteriores, las alacenas son mucho más austeras. Claro, es una generación que come fuera y no almacena grandes cantidades de comida que probablemente no consumirá.
• Se estima que los millennials gastan aproximadamente $20 000 por año, mientras que los no millennials se acercan a los $25 000.

Ahora, con esta información el reto es ofrecer servicios y productos que se adapten a sus necesidades. Planes de ahorro a largo plazo, opciones de financiamiento para viajes o fondos para la vejez podrían ser algunas opciones en las que pudieran estar interesados.