Hemos pasado de la era de la información (siglo XX) a la era de la inteligencia (siglo XXI). Así opina Marcos Cristal, Fundador de Business Skills y expositor de un webinar, organizado por la Maestría en Gestión del Talento Humano, mención Desarrollo Organizacional, en el cual también participó Sahira Herrera, Docente del programa.
Pero, ¿qué significa estar implicados en esta era de la inteligencia? Actualmente, no es importante que tengamos toda la información o las soluciones a cada problema, primero, porque es imposible contar con todo el conocimiento y segundo, porque con lo dinámica que es la realidad es difícil tener una resolución exacta y replicable a cada inconveniente que se nos presenta, explica Marcos.
En ese sentido, en la era de la inteligencia, según Marcos, lo que funciona es tomar decisiones frente al gigante mar de información existente, tomar esa data y conectarla de tal manera que encontremos soluciones innovadoras. Así, en un entorno de alta incertidumbre y dinámico como el actual, el puente para enfrentar los desafíos es la inteligencia lúdica.
Para Sahira, la inteligencia lúdica es la integración de cuatro tipos de inteligencias: racional, emocional, práctica y colectiva. Esto quiere decir que, además del conocimiento debemos tener las aptitudes para comprender el entorno, querer encontrar soluciones a los problemas, contar con orientación a la acción y procurar la sinergia o el trabajo en equipo.
Para comprender mejor el concepto, Sahira explica cómo aprenden los niños: “El juego está incorporado en el ser humano desde la infancia temprana. Todos los niños juegan y así aprenden a interactuar con su entorno”.
Esa misma realidad se traslada a los adultos con la diferencia de que este impulso lúdico hace que tengan la posibilidad de llevarlo a la práctica y no solo imaginar las situaciones como en el caso de los niños.
Por eso, la experta aconseja desarrollar la inteligencia lúdica con el fin de enfrentar los retos que presentan el mundo actual y ser profesionales altamente competitivos. La forma para hacerlo se puede basar en los cinco preceptos siguientes:
- Aprender como un niño, feliz y emocionado.
- Cooperar con otros.
- Innovar/ Solucionar.
- Responsabilizarte de tus acciones.
- Contribuir, comprender que eres parte de un todo más grande.
Profundiza en el desarrollo de la inteligencia lúdica con la Maestría en Gestión del Talento Humano, mención Desarrollo Organizacional.
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