Por Mónica Cualchi, asistente de gestión de la Escuela de Negocios UDLA

Quizás en algún momento has escuchado que “es imposible no comunicar”, enunciado vigente -hoy más que nunca- en la comunicación de empresas u organizaciones, así como en la comunicación interpersonal.

La comunicación a través del lenguaje inventa una realidad social o corporativa si vamos al ámbito empresarial. Independiente del significado propio de las palabras que usamos, la forma en la que al hablar elegimos, organizamos y pronunciamos las palabras determina la manera en la que nos relacionamos con el mundo; como lo escribió el español Carlos Javier González, profesor y asesor de comunicación, “el uso de las palabras configura nuestra realidad y la de quienes nos rodean…”

Más allá del contexto cultural, geográfico e histórico, las personas tienen distintas visiones de la realidad, que quizás obedecen a la lengua que les haya tocado vivir. De ahí que, por ejemplo, a un ecuatoriano le resulta más familiar la cosmovisión de otro latino que la de un europeo, es más, se dice que los latinos somos sociedades “cálidas”.

Entonces, lo que decimos y cómo lo decimos, no solo construye una realidad, sino que determina la percepción de los otros sobre nosotros, de ahí la importancia de elegir qué comunicamos y cómo lo comunicamos, manteniendo el objetivo de generar una comunicación consciente y estratégica.

#Comunicación #Lenguaje #Organización